Actúan en presencia de cloruro de sodio (sal común) y glutamato monosódico (M.S.G.) logrando la sinergia del efecto de potenciar los sabores de los alimentos preparados.
Son materias primas cristalinas de color blanco, sin olor y sabor característico.
Soluble en agua. Son de 10 a 20 veces más potente que el glutamato monosódico y se usan en concentraciones de .01 a .2%, dependiendo del producto a sazonar.
Se utiliza en caldos deshidratados, en conservas como carnes, embutidos, pescados, sopas, salsas, comidas preparadas, salsas de tomate, botanas, salsas de soya y mayonesas.