El ÁCIDO FUMÁRICO es un ingrediente empleado por sus características como regulador de acidez, conservador y estabilizante. Es un ácido orgánico que se encuentra en pequeñas cantidades en muchos vegetales.
Polvo o gránulos cristalinos blancos, de sabor ácido. Ligeramente soluble en agua y biodegradable. Se produce de manera comercial a partir de la isomerización del ácido maleico. Por otro lado, es poco higroscópico y en consecuencia no tiende a apelmazarse en climas húmedos.
Se puede usar solo o mezclado con ácido málico en preparaciones de frutas, panificación, postres, mezclas de especias y más.
Se utiliza también en la elaboración de harinas y tortillas, como conservador antimicrobiano, y mezclado con ácido málico mejoran el manejo de las masas.
Debido a su baja higroscopicidad y pureza de sabor, es recomendado ampliamente para la elaboración de mezclas secas como gelatinas y bebidas en polvo, en las que se logra un ahorro considerable en material de empaque al no existir la necesidad de proteger el producto contra la humedad ambiental.
Mejora y extiende sabores pues aporta un perfil de sabor redondeado y natural sin una acidez desagradable.
Se ha utilizado como un agente antimicrobiano en la prevención de la fermentación maloláctica en vinos, de igual forma provee la acidez.
Se puede usar en postres de almacenamiento a temperatura ambiente, pastillas, gomas de mascar, gomitas, bebidas en polvo, fruta estabilizada, mermeladas, postres helados, vino, industria química e industria del papel.